El simple hecho de ser diferente al grueso de la población genera que haya bullying en las escuelas secundarias: "muchos adolescentes son blanco de burlas por ser gorditos o flacos", aseguró el director del Instituto Municipal de la Juventud, Éver López.
Violencia. En las escuelas secundarias es donde más se acentúa el problema del bullying, de acuerdo a lo expresado por el director del Instituto Municipal de la Juventud, Éver López.
El servidor público manifestó que este fenómeno es algo que se repite, principalmente en el nivel de secundaria y se da por diversos factores hacia los compañeros de clase.
"Es cuando por lo general existen prejuicios y marcan conductas, las cuales cuando se llega a la edad adulta pueda desencadenar en otro tipo de situaciones", aseguró.
En algunos casos se llegan a presentar depresiones que incluso pueden desencadenar en la muerte, como ya se han presentado algunos casos en algunos países.
Por ello reiteró que el bullying es un problema que se presenta principalmente en las secundarias, de ahí la importancia de buscar hablar con los hijos sobre los temas que les preocupan y detectar si están siendo víctimas de este tipo de situaciones.
Lo más recomendable siempre es tratar de dialogar de manera directa para detectar aspectos en donde esté riesgo su integridad física y psicológica, y a las autoridades corresponde el implementar algunos programas sobre el tema.
Fenómeno
El problema del bullying se ha focalizado en las secundarias, donde se les califica a los alumnos por su aspecto físico.
Efectos
Sin embargo, el ser objeto de este tipo de agresiones puede desacandenar en depresiones que pueden llevar a la muerte.
Empujones, burlas, insultos, vejaciones, golpes, incluso cortaduras, son agresiones que menores de edad viven dentro de las es cuelas y que a nadie cuentan.
De acuerdo al portal hastaaqui.org, del Consejo Ciudadano, 62% de los niños y adolescentes que ingresan al sitio no hablan del problema con alguien. Y en el caso de las denuncias telefónicas, 86% corresponde a querellas de padres de familia.
Al no platicar la situación de abuso en la que viven, las consecuencias psicológicas se hacen evidentes semanas o meses después.
“Pueden tener pesadillas, enuresis (mojan la cama), cambian sus hábitos alimenticios (comer mucho o poco). Hay jóvenes que sufrieron bullying hace tres o cuatro años y ahora tienen obesidad”, señaló a Publimetro, Estela Durán, psicóloga de Terapia Breve.
Por otro lado, los niños que platican con sus padres sobre el hecho son inscritos a otros colegios dejando el problema de la violencia sin solución.
“En todos los casos el agredido se cambia de escuela y el agresor se queda tan campante y se adueña de la autoridad. Hay niños que tienen secuestrados los baños, a los que se les paga tributo por entrar”, mencionó por separado Trixia Valle, directora de la Fundación en Movimiento.
Para los especialistas, la atención y las medidas preventivas deben ser atendidas por quienes viven la agresión como quien la ejerce e, incluso, los padres de familia de los implicados.
“En la medida que no se interiorice hacia dónde va el alcance de la violencia, podemos seguir hablando, pero de nada sirve que haya gente que tome cursos y saliendo de éstos se pelee con el vecino”, explicó Milagros Figueroa, especialista de la Facultad de Psicología de la UNAM.
En enero de 2012, se publicó la Ley para la promoción de la convivencia libre de violencia en el entorno escolar del Distrito Federal, la cual contempla las acciones a seguir hacia los menores que se encuentren en situaciones de bullying. Sin embargo, no se condiciona al adulto responsable del menor para que éste reciba tratamiento psicológico.
“En ningún lugar se obliga al padre de familia a que atienda a su hijo. Si un niño con ese daño perjudica a otro, hace que la mayoría sufra y que tenga malas condiciones educativas”, precisó Trixia Valle.
México está en el primer sitio a escala internacional en el número de casos de acoso escolar (“bullying”) en nivel secundaria, según datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), destacó un estudio legislativo.
Un documento elaborado por la Dirección General de Servicios de Documentación, Información y Análisis de la Cámara de Diputados destacó que sólo Nayarit, Puebla, Tamaulipas, Veracruz y el Distrito Federal, cuentan con una ley específica para evitar la violencia escolar.
En las entidades donde no se ha legislado el tema, las leyes en materia educativa plasman de manera general el compromiso de otorgar una educación libre de violencia y fomentar la cultura de la paz.
El estudio denominado “El bullying o acoso escolar” refiere que de acuerdo con la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), 11 por ciento de los estudiantes mexicanos de primaria han robado o amenazado a algún compañero.
En tanto que en el nivel de secundaria ese porcentaje alcanza a poco más de siete por ciento, mientras que el porcentaje de estudiantes de sexto grado de primaria que declaran haber sido víctimas de robo en su escuela es de 40.24 por ciento.
Los porcentajes de escolares que han sido insultados o amenazados en centros educativos asciende a 25.35 por ciento; el de golpeados, 16.72 por ciento, y de quienes han vivido algún episodio de violencia, 44.47 por ciento.
Precisó que la edad más frecuente en la que se presentan actitudes violentas de los niños, según las estadísticas, es entre los siete y 14 años; “hay conductas que aparecen en niños más pequeños, pero son difíciles de medir por falta de métodos específicos”, advirtió.
En el texto se resaltan declaraciones del titular de la Dirección General de Prevención del Delito de la Procuraduría General de la República (PGR), Francisco Castillo Alemán, quien mencionó que uno de cada seis jóvenes víctimas de “bullying” se suicida.
El funcionario de la PGR también destacó que la violencia de ese tipo la ejercen 8.8 por ciento de los niños en escuelas primarias y 5.6 por ciento en secundarias.
Detalló que el acoso escolar se presenta tanto en escuelas públicas como privadas de educación básica y su práctica puede incidir en un bajo rendimiento académico, reprobación e incluso deserción, además de que este comportamiento se expande.
Los legisladores federales han presentado diversas iniciativas para combatir dicho fenómeno social, “que cada vez se hace más latente, sobre todo en las escuelas del nivel de educación básica y media superior”.
Con dichas propuestas se pretende incorporar la figura de “cultura de la paz”, así como otorgar a las autoridades educativas federal y locales la atribución concurrente para promover la creación de mecanismos de prevención, detección y atención de casos de violencia y abuso escolar en cualquiera de sus manifestaciones.
Otro objetivo es facultar a educadores y autoridades escolares para que den a conocer los casos que identifiquen sobre violencia y abuso, e incorporar los términos “respeto” y “armonía” que engloban actitudes de consideración y tolerancia como la ausencia de violencia.
Respecto a las entidades que ya regulan el acoso escolar, mencionó que en el Distrito Federal la ley promueve la convivencia libre de violencia en el entorno escolar, mientras que las de Nayarit y Puebla regulan la seguridad integral escolar.
En el caso de Tamaulipas sólo señala de manera general a la seguridad escolar y en Veracruz se expide una legislación contra el acoso escolar.
La investigadora Claudia Gamboa Montejano argumentó que en éstas hay coincidencias, como señalar a las autoridades que son responsables de conocer sobre los casos de “bullying” que se presenten en el centro escolar.
En tres de estas leyes se precisan los sujetos que deben intervenir en el acoso escolar para considerarse como tal: la persona generadora del maltrato escolar o autor, la receptora o víctima, el receptor indirecto y el cómplice.
MÉRIDA, Yuc.- Al día se registra al menos la atención de un caso de "bullying" en el Área Infantil del Hospital Psiquiátrico Yucatán, lo que ha prendido los focos de alerta sobre el impacto del problema de acoso escolar entre los estudiantes en la entidad.
El director de esa área, Roberto Carrillo Ruiz, indica que si bien estos casos no son identificados inmediatamente como "bullying", pues presentan inicialmente trastornos de ansiedad, depresivos y de conducta o intento suicida, y cuando se hace la historia clínica a fondo se descubre el acoso escolar.
-Estos casos son más comunes de lo que la sociedad puede llegar a pensar y muchas veces están inmersos dentro de otros trastornos, pero cuando se llega a la causa que lo generó nos damos cuenta de que se trató de algún tipo de maltrato, negligencia, violencia física o psicológica -menciona.
El especialista señala que las estadísticas refieren que el 70 por ciento de los niños van a pasar por un episodio de maltrato en su vida escolar, 10 por ciento tendrá más casos y seis por ciento necesitará atención psicológica o psiquiátrica por esa razón.
Refiere que los padres juegan un papel fundamental para detectar esa problemática, por lo que recomienda estar muy atentos ante cualquier cambio conductual, de sueño, alimentación o calificaciones, pues puede tener una causa de fondo, que puede ser la agresión por parte de sus compañeros, por lo que deben actuar de inmediato.
-El "bullying" se debe de denunciar en primera instancia con el maestro a cargo, luego con el director y autoridades correspondientes, porque se debe resolver el asunto socialmente, ya que se habla de un maltrato que puede tener graves consecuencias en la víctima -apunta.
Asimismo dice que es importante que el victimario reciba tratamiento al igual que el agredido, "ya que muchas veces (los agresores) son objeto de conflicto o maltrato en sus casas, de castigo, de hostigamiento y requieren tratamiento".
Saúl David Bautista Alvarado, estudiante que se quitó la vida, por ser víctima de bullying en la Secundaria Ladislao Cervantes, de San Pedro de las Colonias, denunciaron sus familiares
Coahuila.- Ayer, Rosa Elva Luévano Galván y Rocío Esmeralda Alvarado Luévano, abuela y madre de la víctima, respectivamente, pidieron a las autoridades de la Secretaría de Educación, que se castigue a las maestras Patricia Ramírez Sánchez y Sanjuana Alanís.
Las denunciantes revelaron que el 8 de abril el menor fue víctima de ataques psicológicos por parte de un alumno de tercero grado, quien lo derribó a golpes.
No obstante, afirmaron las familiares de Saúl, en lugar de solucionar el problema, las profesores se pusieron del lado del agresor.
Al afectado se lo llevaron a la prefectura donde lo llamaron “gay”, luego lo canalizaron con la Directora, Dora Elia Amaya Segura, donde lo regañaron por supuestamente provocar a los alumnos de otros grados.
La madre y la abuela reclamaron a los maestros por los maltratos, pero no les hicieron caso y esto deprimió al menor, quien acabó con su vida, ahorcándose.
Los familiares del joven se trasladaron hasta Saltillo, donde fueron atendidos por el Delegado de la SEDU, Jorge del Bosque, quien sólo le prometió sancionar a las maestras y directivos del plantel cuando termine el periodo escolar.
Las demandantes revelaron que el estudiante causante del bullying no va a recibir castigo, porque sólo esperan a que se gradúe, para no involucrarlo en problemas.
México, DF.- El gobierno capitalino no debe criminalizar a los niños que ejerzan violencia contra sus compañeros de clase, actividad conocida como “bullying”, aseguró Isabel Miranda de Wallace, candidata del Partido Acción Nacional (PAN) a la Jefatura de Gobierno del DF.
Luego de que este martes el gobierno de la ciudad publicó en su gaceta oficial el reglamento de la Ley para la Promoción de la Convivencia sin Violencia en el Entorno Escolar, donde se indica que quienes sean sorprendidos en esta actitud deberán ser “fichados”, dijo no estar de acuerdo y reprobó tal decisión pues “la constitución claramente dice que mientras sea un menor de edad es responsabilidad de la sociedad y de los padres de familia. Esto es un reflejo de lo mal que estamos haciendo al no cuidar a los menores”.
En entrevista, Miranda de Wallace consideró que al “fichar” a los menores, se les lesiona gravemente “y se le pone un estigma que no tienen por qué vivir porque no es su responsabilidad… no podemos ir criminalizando lo que no hemos cumplido como estado y como sociedad”.
La aspirante ciudadana propuso que para atender este problema que cada día cobra más fuerza entre los estudiantes de educación básica, se deben llamar a los padres de familia o tutores para hablar con ellos o bien, entregar a los menores a una institución “para corregirlos. Además se les debe dar orientación psicológica, clases de civismo y de desarrollo humano.”
Explicó que normalmente lo niños que ejercen el “bullying” “son heridos por la propia familia o vienen de familias disfuncionales o desintegradas”.
La candidata del PAN aclaró que “nadie habla de que se deje impune una falta porque es importante que los jóvenes y los niños sepan que si actúan o infringen fuera de la ley tienen que recibir una consecuencia de sus actos”. Sin embargo, dijo que el estado debe darles protección y sustento.