Las tabletas son tan fáciles de usar que hasta un niño de 3 años de edad ya puede dominar estos dispositivos electrónicos. Las consecuencias de este hecho tienen bastante preocupados a algunos pediatras y otros expertos en el campo de la salud.
Dado que la navegación en una tableta por lo general no requiere las habilidades de escribir o leer, los niños de edad preescolar pueden aprender rápidamente cómo ver películas, desplazarse a las carpetas donde están las fotos de la familia o divertirse con juegos simples. Al mismo tiempo, el uso abundante de tabletas y teléfonos inteligentes perjudica la salud de los pequeños, afirman diversos especialistas citados por Associated Press.
En particular, los científicos han revelado que el uso frecuente de computadoras portátiles y teléfonos inteligentes puede llevar a serios problemas de conducta y retrasos en el desarrollo social de los niños. Sobre todo, las consecuencias de la adicción a los 'amigos digitales' se evidencian cuando los niños alcanzan la edad escolar.
No obstante, los científicos no niegan los factores positivos relacionados con la utilización de estos dispositivos, ya que varias de las aplicaciones formativas pueden ayudar a desarrollar áreas específicas del cerebro y, a la vez, calmar a los niños.
La facilidad de uso hace que las tabletas y los teléfonos inteligentes sean muy populares entre los padres ocupados, que los utilizan para pacificar a sus hijos durante los viajes en coche, salidas al restaurante o mientras están en casa entretenidos con quehaceres domésticos. Y muchos se sienten un poco menos culpables por ello al pensar en el valor educativo de las aplicaciones y juegos que divierten a sus hijos.
Con todo eso, los médicos insisten en que los padres deben limitar seriamente el tiempo que sus críos utilizan los dispositivos electrónicos portátiles y asegurarse de que ellos dediquen el tiempo suficiente a dormir, leer e interactuar con adultos y otros niños.
La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) señaló que, con base en estudios de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), México ocupa el primer lugar a nivel internacional con mayores casos de bullying en nivel secundaria.
Por medio de un comunicado de prensa, la comisión indicó que, de acuerdo con la OCDE, poco más del siete por ciento de los estudiantes de secundaria consultados para el estudio dijeron haber robado o amenazado a alguno de sus compañeros de escuela.
En el boletín de la CNDH se reportan luego datos relacionados con el nivel de primaria.
El 40.24 por ciento de los estudiantes de sexto grado de primaria declaró haber sido víctimas de robo; 25.35 por ciento ha sido insultado o amenazado; 16.72 por ciento golpeado y 44.47 por ciento dijo haber atravesado por algún episodio de violencia.
Por otra parte, 11 por ciento de los estudiantes mexicanos de primaria dijo haber robado o amenazado a algún compañero.
La CNDH precisó que el bullying va desde la agresión física, psicológica o emocional, hasta el maltrato sexual y violencia cibernética, que de forma reiterada puede llegar a excluir socialmente a los afectados.
Ante tal panorama, la comisión destacó que el combate a este fenómeno requiere de un efectivo sistema de información sobre las dimensiones del problema y el grado de violencia que sufren los estudiantes.
Advirtió que para erradicar el bullying se debe fortalecer una política escolar integral que involucre tanto al personal docente, como a directivos, administradores, padres y madres de familia, así como tutores y estudiantes.
MÉXICO, D.F.- Los casos de "bullying" o acoso escolar se multiplicaron en México hasta convertirse en un flagelo que preocupa a las autoridades y hace vivir verdaderas pesadillas a los padres de las víctimas.
Sólo en los últimos días, un niño de 12 años fue golpeado brutalmente por sus compañeros de secundaria en Guanajuato por negarse a fumar y otro de 6 años fue encerrado por otro grupo de mayor edad en un baño de una primaria, luego de cortarle el prepucio.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), a la que pertenece México, señala que este país ocupa el primer lugar internacional en casos de "bullying" entre estudiantes de secundaria.
El número de casos de acoso escolar va en aumento y afecta a 40% de los 18.7 millones de alumnos de educación básica (primaria y secundaria) en instituciones públicas y privadas, es decir que 4 de cada 10 niños sufren acoso.
La situación no podría ser más dramática, pues en el país ya se registraron muertes por este flagelo, según cita Ansa Latina.
En el caso del niño de Guanajuato, según los informe fue agredido por alumnos de la escuela secundaria número Uno, de la ciudad de León, cuando se negó a fumar, y está en peligro su vida pues sufrió lesiones internas.
Los directivos del colegio se lavaron las manos bajo el argumento de que no recibieron ninguna queja por parte del menor de edad, mientras las autoridades educativas en la entidad ofrecieron su apoyo para que la fiscalía realice las investigaciones del caso.
"Es un acto de vandalismo. Lo masacraron al muchacho, con ganas de matarlo", afirmó Rafael Jaramillo, abuelo del alumno.
Otro caso que provocó conmoción fue el de un niño de Jalisco, de 6 años, que sufrió mutilación en el pene y estudia en la escuela pública Miguel Hidalgo del barrio El Retiro, de Guadalajara, la capital de Jalisco.
La Comisión Estatal de Derechos Humanos Jalisco pidió a los docentes presentar un informe sobre el caso y la Fiscalía General se hizo cargo de las investigaciones luego de que la madre del niño elevara una denuncia el 16 de octubre pasado.
Según testimonios de la indagatoria, dos menores de 9 años y uno de 8 habrían cortado con tijeras una parte del prepucio al niño en un baño de la escuela.
La organización Plan Internacional señala que América Latina es la región donde los estudiantes padecen más acoso escolar, con un 70% de casos.
En junio pasado, dos adolescentes de 15 años de Zapopan, periferia de Guadalajara, fueron asesinados porque "maltrataron y se burlaron" de un compañero que era hijo de un narcotraficante en prisión.
El mismo mes se difundió en video a través de Internet sobre una niña de la ciudad de Hermosillo, Sonora, que estuvo a punto de morir asfixiada por un niño sólo porque hablaba con un acento distinto, pues era de Jalisco.
Problema especial
Un estudio de la compañía de seguridad informática McAfee asegura que el 47% de las jóvenes entre 12 y 16 años en México sufrió algún tipo de agresión a través de las redes sociales, principalmente Facebook.
La Primera Encuesta Nacional de Exclusión, Intolerancia y Violencia en Escuelas Públicas de la Educación Media y Superior, realizada en 2008 por la Secretaría de Educación, reveló que el 44.6% de los escolares hombres y 26.2% de mujeres, entre 15 y 19 años, reconoció haber abusado de sus compañeros.
Según los expertos, la violencia contra niños y adolescentes en escuelas afecta lo mismo a pobres que a ricos y a escuelas públicas o privadas, religiosas o seculares, y ni siquiera está contemplada en los códigos penales o civiles.
"No hay una figura especial, aunque sí hay un problema especial", afirmó el presidente del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal, Elías Azar, quien estima que es "un tema preocupante".
CIUDAD DE MÉXICO (14/DIC/2013).- El bullying no es un fenómeno aislado, sino reflejo de un problema social importante en el que influyen muchos elementos de cuestiones políticas y organizacionales en las escuelas y personales, consideró Sergio Molano Romero.
El académico de la Universidad Iberoamericana (UIA) consideró que esos factores "pueden ser atendidos desde intervenciones educativas concretas, atención particular a individuos o grupos que tiene que ver con el establecimiento de políticas educativas".
En entrevista, el catedrático del Departamento de Psicología de esa casa de estudios señaló que también las instituciones universitarias deben tener una voz importante en este fenómeno, que no es nuevo.
"Tiene muchísimo tiempo, tiene el mismo tiempo que la institución escolar, siglos, la gran diferencia es que ahora le ponemos nombre, lo conocemos, lo podemos estudiar, lo podemos comprender, y a la vez que lo podemos prevenir", expresó.
Recordó que en la secundaria había quizá actitudes similares, "había víctimas y victimarios, pero no se llamaba de la misma manera y no habíamos reconocido el impacto que la violencia y el hostigamiento entre los escolares tenía en esa época".
Ahora, añadió, los "adultos estamos viviendo los resultados de esos actos de acoso y hostigamiento de cuando éramos niños. Lo que es nuevo es que le hayamos puesto nombre y lo hayamos podido comenzar a comprender", aseveró.
Lo que si es un fenómeno reciente, añadió, es el video de la chica en Tepito, que es golpeada por sus compañeros, que si no fuera por las redes sociales, por los teléfonos móviles nadie se hubiera enterado de ese evento y seguiría.
Lamentó que México ocupe el primer lugar en Iberoamérica en bullying escolar y consideró que "estamos pagando los platos rotos de un proceso que inició hace muchos años", donde la permisibilidad de la violencia favorecía las relaciones de poder o el autoritarismo.
Comentó que a nivel micro social este fenómeno ha venido sucediendo desde hace muchos años. "Es muy importante concebir que el fenómeno de bullying sucede en la escuela y que la escuela son micro sociedades, son como reflejos de comunidades extensas".
Es decir, explicó, lo que sucede en una escuela sucede en una sociedad.
Por ello, es importante reconocer que si se tiene el problema en las escuelas es porque tenemos un problema social importante, y que hay que estudiar para prevenirlo con eficacia.
Tras haber recibido el reporte de la desaparición de un menor de nombre Josafat Benyair, de 9 años de edad, agentes de la Policía Ministerial del Estado se trasladaron al domicilio de la comunidad de Las Magdalenas, perteneciente al municipio de Rioverde, para coadyuvar con la búsqueda, logrando finalmente su localización y entrega a su afligida madre.
Cuando se entrevistaron con la madre del menor desaparecido, ésta les manifestó a los agentes policiacos que su menor hijo Josafat salió del domicilio familiar desde las 13:00 horas del 30 de diciembre de 2013, con el fin de jugar con unos vecinos amigos de él y ya no regresó.
La madre, junto con su pareja Jaime N., se dedicaron a buscarlo por sus propios medios pero no lo localizaron.
Se pidió el apoyo a la Policía Municipal, quienes acompañados de Jaime N., buscaron al menor, mientras que la Policía Ministerial, en compañía de la madre del desaparecido, se unió a las pesquisas, trasladándose a diferentes domicilios de los amigos de su hijo en dicha comunidad con resultados negativos.
Se cuestionó a la agraviada de cómo era la relación de su hijo con su nueva pareja sentimental, a lo que respondió que Jaime N., con autorización de ella es quien imponía la disciplina en su hogar y que hace algunos días éste había dado una reprimenda al menor a cintarazos.
Al seguir la búsqueda, finalmente se logró establecer que el menor desaparecido se había ido con un amigo de nombre Raymundo, de 10 años de edad, con quien se quedó a dormir.
Los agentes entrevistaron con los padres de ese niño, Raymundo, éstos dijeron que Josafat siempre ha estado muy descuidado por su familia y constantemente se le observa deambulando por las calles de la comunidad o en el monte, solo.
Por lo que los investigadores se trasladan al domicilio citado, siendo una casita rústica de dos cuartos sencillos, ahí estaba el menor desaparecido dormido en compañía de su amiguito de nombre Raymundo.
Lo despertaron los agentes y comenzaron a platicar con él y éste comenzó a llorar manifestando que se quedó a dormir con su amigo porque tenía mucho miedo de que lo golpearan unos vecinos apodados "Los Tigrillos", quienes siempre le pegan.
Tras lo anterior, se hizo entrega del menor a su madre, invitándola a que se presentara ante el Agente del Ministerio Público para desahogar cualquier diligencia correspondiente.
Distrito Federal—La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) inició una investigación por presuntas violaciones a los derechos humanos cometidas en agravio de una estudiante que sufrió acoso escolar o “bullying”, por sus compañeros de posgrado del Centro de Investigación Científica y de Educación Superior de Ensenada (Cicese), y aseguró que este fenómeno se está extendiendo en el país.
Durante los últimos cuatro meses, la joven que cursa un posgrado en Biotecnología Marina ha sido víctima de agresiones y ofensas por sus compañeros de clase, por el hecho de ser originaria del Distrito Federal y sus rasgos físicos.
Visitadores adjuntos de la CNDH se trasladaron a Baja California a efecto de recabar evidencia que permita acreditar la violación a los derechos humanos. Se entrevistarán con la estudiante y con las autoridades escolares.
El organismo aseguró que “el fenómeno del ´bullying´ se ha extendido en las instituciones educativas de todos los grados, y consiste en ejercer violencia de manera deliberada y continua, de uno o varios estudiantes contra otro, con el propósito de lastimarlo, humillarlo, dominarlo o asustarlo”.
El organismo que encabeza Raúl Plascencia Villanueva “se ha manifestado porque se adopten medidas que garanticen que los estudiantes vivan en un ambiente libre de violencia, tanto en la escuela como en el hogar”.
El maltrato físico o sicológico puede llegar a provocar depresión, ansiedad, baja autoestima, deserción escolar, bajo desempeño y, en los casos extremos, suicidio.
Las agresiones pueden consistir en golpes, empujones, burlas, insultos, despojo de bienes y, recientemente, envío de mensajes ofensivos por correo electrónico o a través de teléfonos celulares a las redes sociales.
Por esa razón, la CNDH ha desarrollado estrategias dirigidas a estudiantes, maestros y padres de familia, con el fin de promover la no violencia, el respeto y la tolerancia.