Pese a los esfuerzos que las autoridades educativas dicen hacer para combatir la violencia y el acoso escolar; erradicar el Bullying de los planteles educativos y evitar que niños y jóvenes sigan siendo víctimas de una constante agresión física, verbal o psicológica por parte de sus compañeros, la falta de una política pública bien definida en torno al tema y diseñada por verdaderos especialistas en el área, impide el cumplimiento de objetivos y con ello, la protección a los infantes para quienes el ser objeto de conductas agresivas ha convertido su mundo en poco más que un infierno.
El trágico deceso del niño Maximiliano René Licona Pelcastre ocurrida en el municipio de Huasca de Ocampo, donde el menor de 12 años de edad se quitó la vida al no soportar más las burlas y agresiones por parte de sus compañeros, confirma de manera contundente, que los programas y acciones que se han implementado en Hidalgo para combatir el Bullying, se reducen al fracaso y que es urgente el redefinir las políticas a implementar nuevos métodos antes de que se sigan generando tragedias.
Para nadie es desconocido que autoridades educativas y diversas instancias oficiales, promueven en Hidalgo los programas de “vacunación contra la violencia”, que en las aulas se “capacita” a docentes y directivos de planteles para evitar el Bullying e incluso, que se han adoptado del Instituto Politécnico Nacional y de la Universidad Nacional Autónoma de México, “métodos” como el “violentómetro” para implementarse en sitios donde el acoso escolar es creciente.
Pero con el hecho de que un solo niño se quite la vida porque no soportó la violencia ejercida en su contra por sus compañeros –insisto-, es un fracaso de lo que se ha hecho y confirma lo mucho que se ha dejado de hacer.
De acuerdo a información revelada por la policía municipal de Huasca de Ocampo, el niño Maximiliano de 12 años de edad, decidió privarse de la vida en el barrio La Palma de la comunidad de Ojo de Agua, colgándose de un árbol, ante la imposibilidad de seguir soportando la violencia escolar de la que era víctima en la escuela secundaria 220 ubicada en la localidad de Santo Tomas donde cursaba el primer año.
Dejó una carta póstuma en la que narró los motivos que lo llevaron al suicidio, algunas de las agresiones que tuvo que enfrentar y dispuso de sus pocos bienes entre los que dejó como herencia un teléfono celular a su menor hermana.
La vida trágica del menor, que culminó con su muerte por asfixia mecánica según reveló la necropsia de ley, debe ser motivo suficiente para que las autoridades educativas asuman con la responsabilidad que merece, la necesidad de combatir de manera seria y urgente, la innegable violencia que persiste en las aulas de muchos planteles y que lleva a un incontable número de niños al sufrimiento y la afectación de su estima y sus emociones sin encontrar solución al problema del Bullying.
De nada servirá que se investigue el caso que costó la vida a Maximiliano René Licona y que se sancione a los responsables del acoso escolar, si no se asumen programas realmente efectivos para combatir el fenómeno del cual él es solo un ejemplo, pero que debe bastar para que quede claro que no se está actuando de manera correcta.
Un niño perdió la vida por Bullying, pero son muchos más los que seguramente viven un similar infierno al que él sufrió, por lo que urge protegerlos y salvarlos de un destino que podría ser tan fatal como el de Maximiliano.
Cuando los niños y adolescentes son intimidados en la escuela rara vez el asunto termina allí. Las repercusiones son muchas y a veces profundas. Comúnmente la relación de los niños con otros niños cambia. Los padres y, a veces toda la familia del niño se ven alteradas, a menudo a un grado insoportable. No sólo los niños pueden estar muy afectados por el acoso sufrido en la escuela, pero la posibilidad de tal daño es negado por aquellos que son ciegos a lo que puede suceder y sucede a un sinnúmero de niños y adolescentes que son víctimas en la escuela y reciben poca o ninguna protección. La represión del medio externo, genera cambios que causan displacer.
Todos, en algún momento de nuestras vidas, hemos viajado y experimentado las sensaciones que con ello vivimos. Viajar se puede convertir en una gran terapia para nuestra salud psíquica y física. Este sería el motivo o la causa por la cual el estudiar fuera un año funciona como un elemento generador de placer en la persona; o en su defecto reductor del displacer. Un estudiante que decide abandonar su medio debido a las constantes privaciones, el agobio y las restricciones sufridas en su entorno. Emprender un cambio de residencia supone una modificación en su vida cotidiana (estrés, miedos) que va a influir en la conducta, es una renovación en la rutina que afecta de forma favorable y beneficiosa tanto al cuerpo como a la mente, descubrir lo que no te gusta, aprender a salir adelante cuando surge un contratiempo haciendo que seamos más valientes y resolutivos, activamos nuestros sentidos y ponemos en nuestras vidas un poco de emoción, empaparnos de las culturas, costumbres, nuevas personas, nos hace ser más tolerantes y receptivos, de forma que nos ayuda a fomentar la empatía; abrir el alma a nuevos mundos, aprender del entorno y de todo aquello que se cruza en nuestro camino; conocer nuevos olores, sabores agudizando nuestra curiosidad.
Todos estos cambios que experimentamos en el interior, es a la vuelta de nuestro viaje cuando los notamos de forma más intensa. El principal aspecto de la función psicológica consiste en equilibrar las limitaciones y carencias de la vida cotidiana. Lo cual da una perspectiva de posibilidad, de crecimiento y de progreso.
Por ello, ante un evento de bullying que hayan sufrido alguno de nuestros hijos, una gran alternativa para la superación emocional del problema, es mandarlos un año a estudiar al extranjero, para que ese cambio radical externo se manifieste también en el interior, y la mayoría de las veces funciona muy bien.
La empresa Edulinks cuenta con excelentes programas para realizar estudios en el extranjero que pueden ser de mucho interés para padres de familia que quieren apoyar a sus hijos ante un caso de bullying.
Con el paso del tiempo, la acumulación de conocimientos, la acumulación del dinero y el crecimiento poblacional, forzaron a las sociedades a concentrar las enseñanzas, así como la formulación y vigilancia de las reglas de convivencia en instituciones formales, como son las escuelas o institutos de enseñanza, por un lado y por otro las instituciones encargadas de promulgar las leyes y de procuración de justicia.
Sin embargo, en lo que concierne a los valores, el núcleo fundamental para su conservación y transferencia ha sido, y sigue siendo la familia, pues es dentro del seno de la familia donde los niños y jóvenes viven en primera instancia y por lo tanto adquieren los valores y patrones de conducta familiares que posteriormente repetirán en el núcleo social en el que se desenvuelvan. La escuela puede contribuir al fortalecimiento y enriquecimiento de los valores propios del individuo, de aquellos que se han adquirido y han sido fomentados en el núcleo familiar.
El mundo globalizado en el que vivimos, la formación de los niños se desarrolla de forma distinta a como era en las generaciones anteriores. Partiendo de este punto sabiendo que al nacer desconocen los roles, las normas, las pautas y los valores morales y sociales de su comunidad, los padres nos convertimos en facilitadores de experiencias y relaciones que posibiliten su madurez social. Por lo cual resulta básico aprender a vivir juntos y es esencial educar desde la infancia las normas por las que se rige, o debería regirse, esta convivencia. La educación temprana es aquella encaminada al desarrollo de la personalidad, y de los valores que nos permiten esa convivencia, hasta el máximo de sus posibilidades. Podemos definir un valor como un elemento real, deseable, objetivo y conveniente al ser humano que lo interioriza a través de la experiencia individual y se convierte en una norma moral de comportamiento.
Los niños en las primeras etapas del desarrollo, se abren al conocimiento de sí mismo, del mundo que le rodea y de las personas de su entorno, es decir, se educa influenciado por el ambiente en que se desenvuelve. Este ambiente debe ofrecer unos modelos de roles y valores positivos.
El punto central de esta formación es la observación de reglas de conducta que son socialmente aceptadas, normas que los niños y niñas asimilan en su actividad y en la comunicación con los adultos y el mundo circundante, y que les permiten regular su conducta de manera mucho más efectiva que en etapas posteriores. Es decir valores que refuercen las actitudes que promuevan en los niños el conocimiento de sí mismos para que sean capaces de desarrollar actitudes positivas, responsables con respecto a sus acciones consigo mismo y los demás, adquirir habilidades para expresar argumentos adecuados y capacidad para regular sus emociones, dando razones frente a las reacciones impulsivas.
¿Y que hago Yo como padre?
La primera recomendación regala a tus hijos 10 minutos al día para conocer las cosas que sus niños sienten y necesitan, para crecer sanos.
Compartimos los 10 tips para que los papás puedan evitar el bullying en sus hijos.
Los tips fueron creados por nuestra directora Lic. Trixia Valle y forman parte de las herramientas que Fundación en Movimiento, A.C. intenta otorgar a la sociedad para combatir este mal.
Además fueron prometidos dentro del programa de Martha Debayle el pasado 11 de octubre a través de W Radio 96.9 FM, emisión que presentamos en formato podcast, desde MarthaDebayle.com.
Los 10 Tips:
También puedes escuchar el podcast de Martha Debayle en donde se trató el tema de bullying:
BULLYING ¿Qué sí hacer?
Con Marina Gangiacomo
Subdirectora de educacion secundaria y coordinadora del programa Escuelas sin Violencia, de la Secretaria de Educación del DF
Con Trixia Valle
Directora Fundación en Movimiento
1.- México ocupa el primer sitio a escala internacional en el número de casos de acoso escolar (bullying) en nivel secundaria. *Fuente: Estudio legislativo de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
2.- En México 7 de cada 10 niños y jóvenes han sufrido bullying en alguna etapa de su vida escolar. *Fuente: Estudio del Secretario General de la ONU 2007.
3.- De acuerdo con las denuncias recibidas, 60% son mujeres agresoras. *Fuente: Fundación en Movimiento, A.C.
4.- Se registraron 190 casos de suicidio en el Distrito Federal por bullying en 2009. *Fuente: Secretaría de Desarrollo Social del DF.
5.- El 57% de los encuestados dicen que les hace más daño lo que los demás dicen de ellos. Por ello el “bullying verbal” sí afecta gravemente. *Fuente: Fundación en Movimiento, A.C.
6.- El 36.7% de los encuestados dicen que los alumnos deben acabar con el bullying, contra el 12% que dice que son los maestros quienes deben hacerlo. *Fuente: Fundación en Movimiento, A.C.
7.- El 89.4% de los encuestados dicen que valorarte a ti mismo es una herramienta que te protege del bullying. *Fuente: Fundación en Movimiento, A.C.
8.- El 86.2% de los encuestados dicen que las caricaturas violentas te influyen a volverte violento. *Fuente: Fundación en Movimiento, A.C.
9.- El 27% de los alumnos consideran que el patio sin maestro es el lugar donde más bullying ocurre y en segundo es el salón sin maestro. *Fuente: Fundación en Movimiento, A.C.
10.- Bullying es una palabra inglesa que significa intimidación y se refiere a todas las formas de actitudes agresivas, intencionadas y repetidas, que ocurren sin una razón clara, adoptadas por uno o más estudiantes contra otro u otros.
11.- La constancia en los ataques aumenta la gravedad del acoso y ya es un problema de salud mental a nivel mundial.
12.- El bullying no distingue raza, religión, posición social, estructura física, ni edad. Este problema está atacando cada vez a más temprana edad y ningún sector de la sociedad está libre de él.
13.- El brote de violencia en las escuelas puede condicionar una infracción futura, pues sabemos que el bullying es la antesala del pandillerismo y la delincuencia.
14.- El bullying sexual sucede cuando se toca con mala intención a una persona; cuando existe una presión constante para hacer algo que la persona no quiere hacer o cuando hay manipulación para toquetear o besar a alguien.
15.- El bullying de exclusión social, es -en pocas palabras- cuando se le hace la “ley del hielo” a alguien de forma permanente, al ignorar o aislar con razón o sin ella.
16.- El bullying psicológico es cuando existe una presión que hace a la víctima sentir temor por lo que le hace la otra persona; cuando hay persecución, intimidación (causar o infundir miedo), tiranía (abuso en grado extraordinario de cualquier poder, fuerza o superioridad), chantaje (presión por medio de amenazas), manipulación, que es intervenir hábilmente las cosas, para conseguir algo sin importar mentir y es el arma de bullying más común, ya que en ella entran los chismes.
17.- El bullying físico es el más evidente, ya que hay golpes, son los empujones, pamba, jalones de trenzas… hasta llegar al grado de organizar una golpiza entre varios contra el acosado.
18.- El bullying cibernético o “ciberbullying” es el acoso anónimo o abierto que se da por medio de los medios electrónicos interactivos como: chats, páginas web de corte “chismógrafo”, mensajes escritos del celular, redes sociales, entre otros medios.
19. -El bullying verbal consiste en poner apodos u ofender por medio de burlas o desprecios cuando la persona habla o hace cualquier cosa.
20.- El bullying le resta seguridad a las personas.
21.- Para que sea bullying debe ser: constante, contra alguien y con intención.
22.- La repetición en los ataques verbales es lo que lastima a las personas… no es lo que dices, es cuántas veces lo dices.
En la actualidad las exigencias de la vida diaria, el consumismo, el exitismo, la competitividad, el deseo de autos y casas más grandes, hacen que más personas hagan lo imposible por mantener un cierto nivel social. La falta de dinero que no alcanza para pagar la renta, la escuela de los niños, la tarjeta de crédito, etc. Provoca crisis económica dentro de la familia, es un problema no poco frecuente en nuestro medio, enfrentándose así a un dilema que quizá se agrave con un despido laboral o un mal negocio. No es raro que junto a la pérdida de estabilidad económica la relación familiar (padres e hijos) empiece a hacerse más conflictiva.
Podremos tener muchas razones o excusas para no convivir con nuestros hijos como por ejemplo por falta de tiempo, dinero o por trabajo, en estos tiempos en donde la convivencia entre padres e hijos se están limitando cada vez más, debemos hacer una pausa y hacer algunos cambios. Uno de los más grandes desafíos de trabajar y criar a una familia es tener tiempo y sentirse bien por el trabajo y la familia. No es fácil hacer juegos malabaristas con tres ocupaciones al mismo tiempo: trabajador(a), esposo(a) y padre/madre.
Las actividades en familia son indispensables y muy importantes para lograr un acercamiento, unión y comunicación entre sus miembros, pero solo si realmente se tiene el interés por compartir momentos juntos, seguramente que se encontrará la forma de lograrlo. Hay muchísimas cosas que se pueden hacer ya sea al aire libre o en casa, gratis o de bajo costo. Como por ejemplo: